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lunes, agosto 28, 2017

Amparo Carballo, una autora total

LA TORRE DE LOS SUEÑOS
Manuel Ángel  Morales/ 27/08/2017

http://www.lanuevacronica.com/una-autora-total

EL BIERZOIR







Amparo Carballo, en Librería Ediciones Hontanar-Solana de Ponferrada

Una autora total
La Torre de los Sueños/ La obra de la berciana Amparo Carballo Blanco (Ponferrada, 1955) es de tal magnitud que resulta imposible tratarla en profundidad en La Torre de los sueños.
Es importante centrarse en las claves que definen la obra de Amparo Carballo, señalando algunas de sus características, por otra parte, profusamente estudiadas por personas con más méritos que yo como José Enrique Martínez, Nicolás Miñambres o Alfonso García, por citar algunos nombres de los muchos críticos y estudiosos que le han dedicado a la autora ponferradina su atención.

Empieza su andadura temprana con una obra muy interesante y de colección como es el libro dedicado a Norberto Beberide, el inmortal artista villafranquino, con fotos del fallecido pintor Nicolás Solana y de Ramón Cela. La obra combina los dibujos del artista con fotos en su entorno y con poemas y textos de la poeta ponferradina revelando la profunda conexión de esta autora con el arte y con la pintura, circunstancia que se revela en muchos de sus poemas, pues la misma mirada que tiene el pintor la tiene también Amparo Carballo. La estructura de muchos de sus poemas, la importancia que da a las ilustraciones en sus libros, que se convierten en un elemento más para comprender su obra, así lo pone de relieve. Le sigue ‘Tiempos en la misma voz’ (1993), su primer libro de poemas. Es quizá la edición más sencilla pero ello no va en detrimento del contenido. Es un libro con un marcado acento social, en el que se atisban algunas influencias de Blas de Otero o de Miguel Hernández, como en los poemas ‘Niño poeta’, ‘La voz del poeta’, ‘Palabras’ y sobre todo, en ‘Empeño total” en el que llega a afirmar: No puedo/escribir un poema/y tejer soles/para tapizar/cadenas/ de caducas flores,/mientras/se agita la tierra/violada por el hombre,/forzada/a hacerse estéril/para el gozo/de parir vida.

Pero también hay otra voz, la de la poeta intimista que ya se atisba y que luego va a madurar en sus libros posteriores. Así en ‘Ya no sé’, ‘Interior’ o ‘Luna de piedra entre lirios’.

A partir de ahí, esta segunda faceta, el intimismo, la profundización en los propios sentimientos, en la experiencia íntima, es la que florecerá, creo que acertadamente, explorando un mundo interior que se adivina rico y lleno de lecturas, como corresponde a una poeta que ha hecho del oficio de los libros en sus facetas de librera y editora, un universo en el que se encuentra cómoda. Ese ha sido y es el refugio en el que crece la vena lírica de la ponferradina. Sin el dibujo, el arte y los libros, no podría entenderse su evolución.

Porque se trata de una voz que crece en calidad y profundidad con cada uno de sus libros que se convierten en una profunda exploración del sentir poético y que conforma un entorno personalísimo, una voz propia que destaca en el panorama literario del Bierzo.

En esa profunda búsqueda de la esencia de su poesía nacen los libros ‘Aletheia’ (1998), término que en griego clásico alude a la sinceridad de los hechos y de la realidad, ‘Sin otra luz y otra guía’ (1999), ‘Espejo de Alinde’ (2001) y ‘La sombra de las palabras’ (2002). Se trata de libros que comparten una misma orientación. La poeta no ha ahogado aún su preocupación por el mundo que se observa en versos como: Ay, del ay, del ay, del hambre,/vientres hinchados: revienta/un niño, y no es de hartura. Una mirada crítica de la realidad, una preocupación por los seres más desvalidos, la sensación de que el mundo está sordo, y es el poeta el que no puede estarlo: Nadie sabe./nadie escucha./Todos callan. La autora aborda temas eternos como el amor, el anhelo del ser amado: COMO LA NIEVE EN VERANO/ o la lluvia en la siega,/como un suspiro que escapa/y una golondrina que vuela,/así son mis versos,/palabras al aire, si a ti no te llegan.

‘La sombra de las palabras’ supone el fin de una etapa. Es un libro en el que la desazón y la tristeza, la decepción con el mundo y la realidad se hacen presentes. El propio título nos lo anuncia: la sombra. No hay luz sin sombra, ni alegría sin penas. La experiencia vital conlleva ese sentimiento. Y la autora lo sabe, lo ha experimentado en carne propia. De ahí que exclame en un poema: Así, en lo más profundo/de la alegría, reside una luz oscura/donde anida la pena.

Son poemas que brotan del desasosiego, de una mirada que lanza la poeta hacia su entorno en el que ve ante todo sombras, acechando, como en la vida de cualquiera. Es el conocimiento de la finitud del existir, del paso inexorable del tiempo: Sólo la soledad/es nuestra sombra/ conocida,/única circunstancia/y condición. Ese conocimiento profundo del destino humano, el dolorido sentir de Garcilaso, la aceptación caballeresca del inevitable final de todo lo terreno: COMO LA GOTA DE AGUA/que insensiblemente/labra la roca,/así transcurre sin prisa,/hace y se deshace,/se toma su tiempo/el tiempo/que nos lleva y nos deja/sin memoria/fuera del tiempo:/muertos perdidos/sin luz tapiados,/cubiertos/de sombra y olvido.

La autora vuelve su mirada a la infancia. Así, en el año 2004 publica ‘Los nombres impropios’, y en el 2005 ‘El sapo ambicioso’ y ‘Paragüito(el paraguas enamorado de la lluvia del verano’. Esta vuelta de la autora al mundo infantil tras un libro como ‘La sombra de las palabras’ es algo muy revelador, pues ¿acaso no es la infancia un refugio que todos buscamos en momentos de tribulación? El hecho de volver a ella, esta vez como creadora, la refuerza como escritora y como poeta, enriquecen notablemente su mundo literario como se comprueba en ‘Palabras extraviadas. Metaforismos’ (2006), un libro curioso, muy bien editado con ilustraciones de Javier y Pablo Calleja. Esa gata, Cris, descendiente en línea directa de la diosa Bastet, o ese otro felino,Tabby, que caza palabras como palomas. El gato, un símbolo atávico de lo indomable, de la fuerza de la voluntad, de lo inesperado: La paloma bravía, el gorrión urbano y Tabby el gato se fueron juntos por los tejados a disfrutar de la brisa impura y el cielo manchado.

La poeta sigue su incansable trayectoria con el libro ‘Agua en remolino’ (2006), ‘El vencejo piquito y el poeta’ (2007), ‘Cuarenta mil palabras’ (2008), ‘El misterio de la Torre del Reloj’, (2009) y ‘La sonrisa del Barquillero’, (2010). El entorno ponferradino cobra protagonismo en sus obras, el casco antiguo y sus personajes son parte del misterio y la magia que impregna estas dos últimas obras. ‘Cuarenta mil palabras’ (2008) supone la incursión de la autora en la literatura juvenil. El libro, bellamente ilustrado por su hijo, Jorge Solana, es un ejemplo de intriga y de fantasía. De nuevo, El gato, como el personaje de Alicia en el País de las Maravillas, se convierte en una especie de médium, un intermediario entre el mundo real y el de la fantasía. Es El gato el que lleva a Bibiana al Universo Biblioteca y con el que va a jugar con el Bibliotecario. El libro está lleno de personajes curiosos como el Diablo del Diccionario, el librero del Diablo y también de lugares misteriosos como la Sala de los escritores clandestinos. En conjunto, es una obra interesante y atrevida, una lectura recomendable que bajo una capa de misterio esconde muchos secretos y mucha crítica del mundo de la literatura, a veces cruel y lleno de maledicencia y soberbia injustificada.

‘La voz de los metales’ (2013), presentado en la UNAM, con prólogo del Ingeniero Químico Metalúrgico de la UNAM (México), Antonio Huerta Cerdán, es la última obra publicada de poesía de la prolífica autora berciana. Como bien señala la propia autora : «Escribir poesía no es un acto sencillo, es como la lenta extracción de los metales contenidos en los minerales». La poesía de Amparo Carballo alcanza en este último libro plena madurez. Se nota la seguridad, la falta de prisas, el oficio. Se evidencia que la poeta ha llegado a un momento de espera, de examinar la vida desde una perspectiva más serena, aunque a veces, la serenidad pueda llevar al estancamiento que la poeta advierte: Ningún mensaje nuevo que contestar,/Ni tormentas que liberar/Ni telarañas, ni carbonilla que quitar. La obra de Amparo Carballo aún no ha terminado. La singular pasión que pone en su labor editorial, el interés en el cultivo de los más diversos géneros, sin duda, la arrastrará a nuevas aventuras literarias.

sábado, agosto 12, 2017

Memoria de Compludo en la posguerra

 Compludo, recuerdos de una infancia


 
C. F. C. | ponferrada/ Diario de León
12/08/2017

«No dejar morir algunas tradiciones y sucesos curiosos que tuvieron lugar en el pueblo de Compludo entre los años 1940 y 1950». Así se presenta el libro Compludo, recuerdos de una infancia (Hontanar), con el que Ángel García Redondo, nacido en 1936 en la localidad berciana y hoy residente en las Islas Canarias, ha querido dejar testimonio de la vida cotidiana durante los primeros años de la posguerra en una de las localidades de la comarca más emblemáticas gracias a su herrería. La fragua y la herrería, los huidos en el monte, la siembra siega, la recogida de las castañas, la matanza y otras escenas de la vida en un pueblo, componen los capítulos del libro de memorias de Ángel García Redondo, de marcado carácter etnográfico y a la venta en las librerías de Ponferrada, junto un peculiar vocabulario de palabras moribundas como amarrizar, costumbre de las ovejas de esconder la cabeza en el rebaño para dormir o bastio; donde bate la lluvia con el viento.

 http://www.diariodeleon.es/noticias/bierzo/libro-recoge-memoria-compludo-posguerra_1180524.html